Nos quejamos que no ya no hay hombres románticos que nos cumplan todas nuestras fantasías, que nos lleven al cielo con detalles y con que con un beso nos quiebren los huesos por la emoción. Pero, terminamos por fijarnos en quien tiene toda la actitud de un renegado, porque nos provoca romper la ley y dejar las normas a un lado cuando estamos con él.
¿Qué tienen los chicos malos que nos atrae tanto?
Todas las mujeres en algún momento hemos estado relacionadas con un “chico malo”. Algunas con el tiempo cambian y rectifican el camino, pero hay quienes no escuchan a nadie y terminan vinculándose una y otra vez con el mismo perfil de hombre.
La respuesta a esta terquedad de estar al lado de un hombre que nos haga “sufrir”, tiene una explicación científica. Según una investigación hecha entre las universidades Rochester, Illinois y el IDC en Israel, manifiesta que las mujeres prefieren a los chicos malos porque los hombres que están en contacto con sus emociones les parecen “poco interesantes hasta aburridos”.
El estudio se realizó a 112 estudiantes universitarios y resultó que entre los hombres es distinto, prefieren mujeres con “rostro tierno y sensible”. Mientras que los chicos con estos mismos rasgos, fueron los menos deseables como parejas para las féminas.
Este desgano que tienen las muchas mujeres por varones con cara sonriente, sensibles, ese tipo que te da confianza en la primera cita. O sea, tienen la idea de que “nadie es tan bueno para ser real” y podría ser un manipulador o un psicópata. Algunas consideran que ese exceso de amabilidad, educación, caballerosidad es un arma para conseguir llevarlas a un encuentro sexual más rápido.
Los investigadores creen que las chicas les agradan más el “malo” porque no se guardan nada, son directos, dominantes, no se andan con rodeos. El hombre rudo les da esa pizca pasión, energía, adrenalina y aventura a sus vidas. Además, claro que tienen una gran fama de ser mejores en la cama.
No obstante, las mismas que quieren esa rudeza cerca de ellas, también quieren un compañero leal y cariñoso. Es una contracción tremenda difícil de entender.
En el mismo estudio se les preguntó a las mujeres ¿Qué quieren las mujeres? Y no fueron capaces de responder claramente lo que desean.
(FUENTE: peru.com)
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